lunes, 25 de febrero de 2019

me pregunto cual es mi problema con mi amor incondicional a las personas más llenas de tóxicos que se me cruzan, porque aunque no te vea, tengo tu sabor en la punta de los labios cada vez que lo prendo.
siempre es de noche y termino con los ojos llorosos, eso no hace más que avivarme tus recuerdos.
el problema es que yo no me puedo escapar fumando (como lo soles hacer vos), porque es cuando más aparece tu fantasma, de ese del que muy bien sé escapar durante el día.
mi mente es un huracán y no puedo huir ni en alcohol ni en flores. yo misma ya soy nociva para mi propia salud.
no me queda más que luchar con mis demonios siendo lo más racional posible, y que difíciles son esas batallas interminables.
me dejaron hasta sin miedos, pero se lo agradezco.
vos quédate con tu marihuana y que él se quede con sus vinos, yo voy a buscar mis soluciones por otra parte.
06.02.19



Siento que estoy tratando de escribir sobre tus ojos azules hace años, pero me sigue deteniendo la idea de que ninguna palabra inventada va a poder jamas expresar verdaderamente lo que refleja tu mirada.

trece/dos/diecinueve.

lunes, 11 de febrero de 2019

Reencuentro

Hoy te vi otra vez.
Después de tres años, de creer que ya maduramos, cambiamos y lo superamos. Volví a ver esos ojos llenos de veneno y sentir el aroma a sangre saliendo de tu boca.
Yo sé que no era tu cuerpo, pero puedo jurar que eras vos.
Fue como un déjá vu, a todos los domingos de mi infancia.
Hasta tuve como primer reflejo, cuando él abrió la puerta, de salir corriendo y esconderme a llorar en el baño como solía hacer.
Ahora desde la distancia puedo distinguir más tu dolor que es casi tangente, casi tan visible como esa botella de vino.
Por fin llego el día, en el que crecí, pero mucho más importante, vos pudiste superarte.
Aunque me duela esta marca que me dejaste, y esta herida que se abre cada vez que me miro a un espejo a las tres de la mañana.
A pesar de todo, mi corazón se alegra de que hoy, el que me abra la puerta seas vos, y no él.