A E P D S
Abajo del sol, desaparece esta soledad desesperante.
Después de estrangularme, de ahogarme.
El día salva a el alma.
El dolor se apacigua debajo de él.
Aquella despedida es sutilmente disimulada entre sonrisas.
Pero al anochecer, atormenta ese adiós.
Se dificulta descansar.
Si dormir es despiadado sin su piel.
Si aquellos sueños piden por su alma, por su esencia, por su ser.
Sin él es difícil.
Pero siempre sale el sol, de eso estoy segura.
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